Conócenos

La Sagrada Familia de Burdeos somos una familia espiritual internacional fundada en 1820 por Pedro Bienvenido Noailles, un sacerdote de Burdeos.

Todos sus miembros estamos animados por un mismo espíritu y buscamos un mismo fin. En solidaridad y complementariedad, manifestamos la imagen de Familia propia de la Iglesia. Somos responsables de vivir el carisma del Fundador de tal manera que sea significativo para el mundo de hoy, así como de difundirlo y darlo a conocer.

“En mi sueño la Sagrada Familia aparecía como un árbol gigantesco,

parecido a una encina con ramas repletas de verdes hojas.

Se veían en ella flores y frutos de todas las estaciones,

pájaros de diferentes colores, de todos los países:

Cada especie tenía su canto.

Pero en algunos momentos, todos cantaban como una sola voz

en armonía perfecta, parecían decir

Gloria a solo Dios, todo por María"

"Todo carisma nace de la libertad del espíritu. En consecuencia, no se puede pronosticar su fuerza, ni se puede anticipar su futuro."

En la Asociación de la Sagrada Familia, la obra fundada por el P. Noailles, descubrimos un principio dinámico, una capacidad de renovación, de adaptación y de cambio. La visión del Fundador estaba condicionada por su historia. Quienes continuaron su obra, mantuvieron vivo el carisma siendo fieles a su espíritu y a sus intenciones, pero integrándolo en los cambios históricos. Supieron traducir al lenguaje de su época los acontecimientos del pasado, que habían modelado su propia identidad, y la Palabra que nos revela a Dios, en cada momento de la vida. El carisma es un reflejo del misterio de la salvación y es, también, una misión especial.

La Sagrada Familia desde su fundación está compuesta de todas las vocaciones:

- Hermanas Apostólicas

- Hermanas Contemplativas
- Instituto Secular
- Asociados laicos
- Sacerdotes Asociados

Todos sus miembros están animados por un mismo espíritu y buscan un mismo fin. En solidaridad y complementariedad, manifiestan la imagen de familia propia de la Iglesia. Son responsables de vivir el carisma del Fundador de tal manera que sea significativo para el mundo de hoy, así como de difundirlo y darlo a conocer.